Esa primera vez

          Esa primera vez, esa que siempre recordaremos, en la cual pruebas por primera vez una polla; te ves por primera vez en una situación en la que has estado soñando casi a diario y por fin se hace realidad, tu primera felación, tu primera mamada, en la que sientes ese manjar varonil duro y venoso en tu ansiosa boca, en la que por fin tu sueño de probar una buena polla, se ha hecho realidad.
        Nosotras, como buenas sissies que somos, aunque no hayamos tenido una experiencia previa, sabemos jugar perfectamente el papel de nena tímida y sumisa; que cuando se da por fin, la oportunidad de vivir lo que hasta entonces ha sido pura fantasía, se hace realidad. Que aunque se crea el macho en cuestión, ese amigo con el que vas a vivir tu primera experiencia sissy, él se cree que te ha forzado para que le comas la polla y piensa que tú te has rendido ante el, como macho orgulloso que es.
        Pero nada más lejos de la realidad, ya que hasta que llegará ese dulce momento, tu lo has ido ideando durante largo tiempo, todo lo has tenido bien atado y pensado a lo largo del tiempo, para que todo salga como tú habías planeado. Ya que tu plan para vivir esa experiencia, tantas veces soñada, de llevarte una polla a tu boca, no dejarías punta sin hilo, estudiar bien la fecha en la que poder vestirte de mujer, de pies a cabeza, en los carnavales, en Halloween o en alguna fiesta de disfraces.
        Llega el momento en el que te encuentras en la fiesta soñada, con el vestido soñado, la peluca soñada, el maquillaje soñado, el conjuntito de braguitas y sujetador soñado, y los tacones soñados. Te tomas alguna bebida para que te ponga a tono, tomas algunos tragos para desinhibirte, y notar que se te va quitando el miedo de exponerte por primera vez como travesti en público, muchas de las presentes notarán que para haberte disfrazado del típico "de mujer" está muy logrado, ya que tu mirada, tu forma de moverte, tu amaneramiento tantas veces reprimido, por fin sale a flote, y es algo que a la mayoría de las mujeres saben perfectamente como te sientes y lo que eres en realidad, un niño afeminado.
      Pero el macho en cuestión, para nada le va a dar por imaginar en lo que piensan la mayoría de las chicas de la fiesta; tu te has fijado en el, es tu amigo, le has ido dando pistas a lo largo de la velada, el va a guardar tu secreto, a cambio de hacerle una mamada (lo típico). Ya sabes que esa iba a ser su respuesta, te das cuenta de lo simples que pueden llegar a ser el género masculino, algo muy oído por parte de las mujeres, que hoy a ti te toca vivirlo como cualquier otra mujer. Dejando actuar al macho, como si el fuese el conquistador, el "Super-Macho", cuando en realidad es una, yo, toda una sissy declarada, pero como tantas otras mujeres, la que ha ido tejiendo y modelando la situación, fingiendo sumisa y delicada, para conseguir que la presa, en este caso el hombre, caiga rendido a tus pies, en tu tela de araña particular, como si fueras la Mujer-Araña.

       P.D: Lo que más recuerdo y lo que más me gusta a rabiar, por haber tenido la fortuna de vivir una experiencia similar, es saber... que una vez que dejas atrás todos prejuicios, pensar en "el que dirán" etc etc... te desinhibes, tomando un nuevo aire fresco, explotando, dejando salir a la mujer que crece en ti y que siempre has llevado dentro de ti. Una se da cuenta por fin, que piensa, siente y ejerce como toda una MUJER de forma natural, que aunque una haya nacido varón, una actúa como toda una mujer de verdad, en el divino y maravilloso arte del cortejo y de la seducción.  

     Besitosss corazonesss