Esto es la historia de una mujer, que para que negarlo, TODA UNA MUJER, que tuvo digamos la mala suerte, o quizás no tanto de ligarse a un hombre que luego resultó que no era tan hombre como ella creía.
Todo empieza la primera noche que se van a la cama juntos...
Como veis, por lo que se ve, ya llevaban 2 semanas saliendo juntos, y era la primera vea que se iban a la cama, y no por que ella le parara los pies, sino porque el "machito" siempre le ponía excusas, que soy hoy no puedo, que mañana tengo que trabajar... que si me duele la cabeza...etc, ya veis, raro raro en un hombre digamos de verdad.
Para ser la primera vez que se acuestan juntos, aparte de no dar la talla como hombre, la cara de la desdichada dama lo dice, va y le dice que si esa camiseta de tirantes no es para una dama, que parece una ordinaria, que donde esté un bonito camisón de raso estaría monísima monísima.
Cosa que le dio por pensar lo peor la pobre mujer.
La chica era una mar de dudas, lo de la noche anterior lo dió mucho que pensar, jamás un hombre le había dejado tan insatisfecha, y más de la forma que lo hizo.
Estando ella en el cuarto de baño, ideó un plan; dejar las bragas que tanto le gustaban (no paraba de decirlo a todas horas) encima de la cama como tiradas, como quién no quiere la cosa.
Y pasó lo que pasó...
Lo que hasta esa fecha era "medio hombre", dejó de serlo, para ya a partir de pillarle "en bragas" y caer en la trampa que le había proporcionado su hasta ahora novia, en un mariquita con todas las letras, jiji.
Ella se quedó mirando desde la terraza el interior de la habitación, viendo como "el" se pavoneaba delante del espejo, viendo como le quedaban de bien las braguitas de su hasta entonces novia.
Las carcajadas de ella se oyeron por todo el vecindario, en vez de echarse a llorar y maldecir por echarse un novio maricón, fue todo lo contrario, ella sabía que con lo guapa y lo divina que era no le iban a faltar pretendientes y machos que la llevasen a la cama y desearla como mujer; tenía delante lo que para nosotras nos suena mucho, una auténtica sissy que había acabado atrapada en la tela de araña, de la que la dueña y va hacer convertirse en toda una princesita tanto para deleite de ella como de sus amigas.
Ella, viéndole "en bragas", quiso darle una última oportunidad a lo hasta hace poco era "medio hombre", y empezó a bajarse de la forma más sensual y femenina (algo innato en ella) los tirantes de su vestido. Pero lo que consiguió fue todo lo contrario, él no sabía que hacer ante tal sugestión, y menos embutido en unas lindas braguitas, sólo ponerse colorado/a como un tomate, a ella le dio otro ataque de risa, le dijo bien alto que para nada era un hombre, que era toda una "nenita", otro hombre en su lugar haría locuras con ella, pero aquél hasta entonces "medio hombre" se derrumbó, y confesó lo que era, después de pregonarlo bien alto su hasta entonces novia o rollete.
Después de "la gran pillada", la guapísima chica de tanto y tanto reírse se fue a descansar, fue tal el ataque de risa que la dio que se fue a echarse en la cama un ratito.
Mientras ella descansaba, la ya "futura" sissy, se detuvo a los pies de la cama y le contó su secreto largamente guardado y que (como nos ha pasado a todas) fue descubierto. Después de un largo rato contándo sus secretitos de mariquita, le propuso a tan bella dama que le dejase sus braguitas, ya que para la ya sissy era su auténtico fetiche.
Pero ella apenas le hizo caso, le tenía preparado algo que para nada se esperaba...
Ella le propuso hacer realidad sus sueños, que le ayudaría, siempre antes pidiéndole perdón por si por si comportamiento pudiese haberle ofendido: pero "el" no se lo reprochó, sino todo lo contrario, le dio las gracias por digamos, de esa forma, hacerle abrir los ojos a una realidad que se presentaba divina divina.
Lo primero que hizo la guapísima chica es medio desnudarse para entrar en situación, pero en otra situación muy distinta a la que ella solía estar de esa guisa delante de un hombre, y casi a la pobre le da otro ataque de risa. Pero se supo contener y después de una amago de carcajada le dijo lo que son las bondades de una mujer que "el" quería llegar a imitar.
Con el paso de los días, hablándole de las bondades de lo maravilloso que es ser una fémina, le propuso algo que ella sabía que le iba a encantar, y acertó, que es el maquillaje. Cualquiera que se diga que es un hombre y ver a una mujer de esa forma aplicándose el maquillaje, no dudaría ni un instante en cogerla a horcajadas y follársela encima del tocador (ella seguro que estaría encantada); pero en ese lugar había un mariquita con una sonrisa de oreja a oreja, prestando mucha atención a los consejos de maquillaje que ella le daba.
Por último le propuso ir juntas de compras; después de largas charlas sobre el maravilloso mundo femenino, ella también se vio sorprendida de lo mucho que la "mari" sabía, la ya loquita era toda una experta, sabía mucho de las mujeres, pero desde el punto de vista de un macho macho que tenga muchas experiencias con mujeres, sino que en su pequeño mundo desde que era niño, se había mamado y empapado de todo lo que rodea al universo femenino y que ella fue, o se convirtió en su hada madrina, que le hizo salir de ese capullo y convertirse en una linda mariposilla.
Tal era afán y las ganas de comerse el mundo por parte de la ya sissy con todas las letras, que la bella mujer le tenía que parar de lo loca que estaba por parecerse a la mujer que una vez hace tiempo la tuvo por novia.
Tal era la locura en ella, que cuando la propuso irse juntas a comprarse "trapitos", que no dejaba de correr y ver todos los escaparates de una forma loca loca de contenta.
Pues ésta es una maravillosa historia ficticia que espero que a más de una le halla pasado, o que tenga la suerte de poder vivir.
Besitosss Reinass
PD: Todas las fotos de éste post son de la guapísima actriz italiana Sabrina Ferilli a lo largo de su dilatada carrera, un beso para tan bella Diva, muaaaaaaaaaac
